Una historia antigua 

En el año 2054, el mundo estaba inmerso en una nueva era. Las gigantes corporaciones habían tejido una red de control que se extendía por todos los rincones de la Tierra, todo gracias a las máquinas y la inteligencia artificial. Los seres humanos habían perdido su posición central en el universo, pero seguían siendo esenciales para mantener el funcionamiento de la sociedad. En el corazón de esta revolución tecnológica se encontraba la ciudad de Titán, gobernada por la todopoderosa empresa de seguros «Titanshield.»
En este mundo altamente automatizado, Titanshield había alcanzado un dominio asfixiante, controlando el 99% del negocio de seguros. Sin embargo, un hombre llamado David, un corredor de seguros que trataba a las personas como seres humanos y no como simples números, había logrado hacerles frente. Su pequeña correduría de seguros había arañado ese preciado 1% de mercado, y su enfoque humano estaba resonando en la población. Esto, por supuesto, causaba preocupación en Titanshield.
La compañía gigante no podía tomar medidas físicas contra David sin violar las leyes de la robótica de Isaac Asimov, así que decidieron luchar en el terreno de los negocios. Prepararon una campaña feroz destinada a aplastar a David y su pequeño negocio de seguros. Surgieron tres alternativas para David, y su elección podría decidir su destino y el curso del mundo tal como lo conocían.
Alternativa 1: La Resistencia Tranquila

David podría optar por mantenerse firme, resistir el embate de Titanshield y seguir ofreciendo seguros basados en la empatía y el cuidado humano. Esto podría ganarse el respeto de algunos clientes y convertirlo en un símbolo de resistencia contra la deshumanización impuesta por las corporaciones.
Alternativa 2: La Innovación Silenciosa

Otra opción era embarcarse en una carrera de innovación, buscar maneras de utilizar la tecnología para mejorar aún más su servicio, manteniendo al mismo tiempo su enfoque humano. Esto podría permitirle competir de manera más efectiva con Titanshield y atraer a más clientes que valoraran la combinación de tecnología y humanidad.

Alternativa 3: La Alianza Inesperada

Por último, David podría buscar aliados dentro de Titanshield mismo, individuos o facciones que compartieran su visión de un mundo donde las personas no fueran solo estadísticas. Una alianza inesperada podría socavar los planes de Titanshield desde adentro, desafiando su control absoluto.

David enfrentaba una elección crucial, una que no solo definiría su destino, sino que también podría cambiar el rumbo de un mundo donde las máquinas y las corporaciones habían tomado el control. El reloj estaba en marcha, y el futuro de Titán City pendía en la balanza.